Manifiesto de los Entomólogos Ibéricos
El pasado junio de 2023 se celebró en Alicante (España) uno de los encuentros científicos más significativos para los entomólogos de España y Portugal, el Congreso Ibérico de Entomología. En esta XX edición, bajo el lema “PAREMOS EL DECLIVE DE LOS INSECTOS”, los entomólogos ibéricos indicaron una gran preocupación por la situación actual de las poblaciones de artrópodos. Fruto del XX Congreso Ibérico de Entomología, surgió un Manifiesto que encabeza el Volumen 47 (3-4) del Boletín de la Asociación española de Entomología.
MANIFIESTO DE LOS ENTOMÓLOGOS IBÉRICOS
Del 26 al 30 de Junio de 2023 la Universidad de Alicante acogió el XX Congreso Ibérico de Entomología organizado por el Instituto de Investigación CIBIO de esta Universidad bajo el lema Detener el declive de los insectos. A lo largo de una semana, 165 especialistas procedentes de universidades y centros de investigación españoles y portugueses, aportaron los resultados de sus investigaciones y pusieron de manifiesto su preocupación por el estado de conservación de las poblaciones de insectos en todo el mundo
Este Congreso ha supuesto una excelente oportunidad de reencuentro de especialistas en el campo de la Entomología que expresaron su preocupación por el grave declive de las poblaciones de insectos en los últimos 30 años, hasta el punto de que la comunidad científica ya denomina a este proceso como el Apocalipsis de los Insectos. Los datos de que disponemos indican que la desaparición local y la extinción de especies en este grupo de animales es un 8% mayor que la de aves, anfibios o reptiles. Es una grave, y en apariencia silenciosa, extinción que amenaza la biodiversidad y el correcto funcionamiento de los ecosistemas. Este fenómeno mundial afecta a nuestra fauna de manera grave, y los entomólogos ibéricos no pueden quedar impasibles ante esta situación, por lo que desean trasladar a la sociedad el mensaje de que el problema es cada vez mayor y que esta pérdida afecta a aproximadamente un tercio de las especies de insectos a nivel mundial, lo que traducido a cifras arroja el dato de que cerca de 300.000 especies de insectos pueden estar afectadas por algún grado de amenaza que está llevando a muchas especies a su extinción.
El problema es muy grave dado que no se trata sólo de la pérdida de especies, algo que éticamente no podemos permitir, sino que está afectando al funcionamiento de los ecosistemas y al mantenimiento de procesos biológicos conformados a lo largo de millones de años de evolución, lo que tiene una clara repercusión negativa sobre la Salud del Planeta y Humana. Los insectos mantienen la diversidad vegetal y la productividad de nuestros cultivos gracias a los procesos de polinización en los que intervienen, ya que más del 80% de las plantas dependen de los insectos para producir frutos. Los insectos son los principales agentes que eliminan en la naturaleza restos vegetales y animales, actuando de recicladores de materia orgánica que nutren los suelos. Las redes de alimentación de numerosos vertebrados dependen de los insectos para sobrevivir y también en los insectos encontramos los recursos naturales que permiten al agricultor hacer frente a plagas de los cultivos mediante la aplicación de control biológico. Del buen funcionamiento de los ecosistemas depende el estado de bienestar humano y la salud planetaria y los insectos son los principales organismos que con su actuación permiten que tengamos servicios ecosistémicos que contribuyen gratuitamente a mantener nuestro bienestar.
En consecuencia, los entomólogos ibéricos creemos necesario proponer una serie de acciones que pueden cambiar la percepción que de los insectos tiene la sociedad, trasladando a los agentes sociales y administraciones una serie de medidas que contribuyan a Detener la pérdida de diversidad entomológica, como se indica en el lema del Congreso
Propuestas para la conservación de insectos
- Fomentar la investigación sobre los insectos en España y Portugal, apoyando desarrollo de proyectos de seguimiento y evaluación que permitan conocer su estado de conservación real, facilitando su adecuada protección y frenar su extinción.
- Implementar las herramientas necesarias para que los insectos sean considerados adecuadamente como figuras de protección, permitiendo incorporar medidas específicas para su conservación y la protección de sus hábitats.
- Impulsar acciones de sensibilización a la sociedad, y programas educativos que pongan de manifiesto los beneficios de los insectos, fomentando la colaboración ciudadana en programas de monitoreo y conservación de sus especies.
- Solicitar a las administraciones que adopten medidas que contribuyan a frenar las principales amenazas para los insectos, evitando la destrucción de sus hábitats.
- Introducir en los proyectos de desarrollo de infraestructuras, medidas correctoras de protección y restauración de los hábitats de insectos y su conectividad.
- Potenciar en los jardines urbanos la existencia de hábitats silvestres interconectados con flora autóctona en linderos, rotondas, alcorques y otros espacios sin edificar ya que constituyen importantes hábitats para alimento, lugar de cría y refugio de muchas especies de insectos.
- Cambiar la gestión de espacios urbanos regulando las podas y siegas de plantas silvestres, conocidas como “malas hierbas”, principalmente en periodos de floración.
- Potenciar en los ambientes periurbanos la interconexión de hábitats naturales mediante la conservación y favorecimiento de lindes, senderos y vías pecuarias, riberas fluviales, etc.
- Promover buenas prácticas agrícolas, potenciando y valorando la agricultura ecológica y el control biológico e integrado de plagas, ofreciendo incentivos a los agricultores por tomar medidas que contemplen la conservación de los insectos.
- Buscar alternativas a los tratamientos antiparasitarios al ganado con productos no nocivos para la entomofauna descomponedora.
Para que muchos de estos objetivos puedan llegar a ser una realidad, se requiere EDUCACIÓN e INFORMACIÓN VERAZ para toda la ciudadanía. Debe impulsarse este conocimiento en los centros educativos, desde infantil hasta la universidad, e introducirse en cursos dirigidos a profesionales de sectores agrícola y ganadero, jardinería, asociaciones ciudadanas y administraciones con responsabilidad en medio ambiente.